En el área protegida Reserva Natural Isla Juan Venado, justamente en la comunidad Las Peñitas, León, realizamos la siembra de 14,000 propágulos de Mangle, a fin de impulsar el desarrollo de las barreras naturales de protección para mitigar la erosión del suelo y las afectaciones provocadas por el cambio climático.
Esta jornada se desarrolló en el marco de la campaña nacional, “Verde, que te quiero Verde”, donde participaron comunitarios, estudiantes de Biología y Turismo de la UNAN-León y Guardas de áreas protegidas.
Los manglares constituyen un hábitat fundamental para el ciclo de vida de algunas especies marino costeras y acuáticas, como peces, moluscos y aves.
En Nicaragua abarcan aproximadamente el 30 por ciento de la línea costera y se distribuye entre las costas del Pacífico y el Caribe.
Estos ecosistemas producen una gran cantidad de materia orgánica como hojarasca. Además, contribuyen a retener los sedimentos, filtran las aguas que abastecen a los mantos subterráneos, reteniendo desechos y sustancias tóxicas para que no lleguen al mar.