La Reserva de Recursos Genéticos Apacunca, se ubica en la parte norte de la Región del Pacífico de Nicaragua, en el departamento de Chinandega, forma parte de las planicies inundables de la Reserva Natural Delta del Estero Real.
Tiene una extensión de 1,576.30 hectáreas, el 63% del área de la Reserva está dentro del municipio de Somotillo y el 36% restante se encuentra bajo la jurisdicción del municipio de Villanueva.
La principal importancia de esta reserva es que alberga las últimas poblaciones del maíz Teocintle, especie silvestre emparentada con el maíz y con alto potencial forrajero, el cual es endémico de la Reserva de Recursos Genéticos de Apacunca.
El Cro. Francisco Martínez, Delegado Territorial del MARENA en Chinandega, explicó la importancia de implementar estrategias de conservación para garantizar la preservación de esta especie de maíz primitivo en peligro crítico de extinción “nosotros venimos implementando planes de fincas como una estrategia, para aumentar y garantizar la restauración de las poblaciones de Teocintle, que se había visto afectada por diferentes actividades agropecuarias; más, sin embargo, desde el trabajo del ministerio con el enfoque de este proyecto, nosotros venimos trabajando con 6 productores con los que queremos establecer diferentes parcelas para la conservación de esta variedad”, dijo el Cro. Martínez.
Sin embargo, diversos factores, como el cambio climático, han puesto en alto riesgo de extinguir el Teocintle, es por esta razón, que el Buen Gobierno, a través del Ministerio del Ambiente y de los Recursos Naturales MARENA, desarrolla acciones concretas para rescatar esta importante especie.
Gracias al programa “Fortalecimiento de la Resiliencia de Áreas Protegidas” GEF 5, se ha trabajado con protagonistas dueños de pequeñas parcelas, quienes se han comprometido a sembrar un cuarto de manzana con la especie de maíz Teocintle.
Aquí los pequeños y medianos productores, son la clave para la conservación del maíz Teocintle.
Tal es el caso del Cro. Felipe Méndez, Propietario de la finca Monte de los Olivos, comparte con mucho entusiasmo parte de su experiencia en la conservación de este maíz, “estamos metidos en el proyecto GEF 5, apoyado por el MARENA que está liderando este proyecto… como podemos observar esta plantaciónestá bastante adelantada y aquí esperamos tener muchas semillas para conservar y darle al resto de los otros productores que no han accedido a esta semilla”, remarcó.
De la misma manera, el Cro. Nilson Martínez, Propietario de la finca Jehová Jireh, menciona sentirse contento por aportar a la reproducción de esta semilla que los identifica en el departamento de Chinandega, por ser endémica y de gran importancia para Nicaragua, “esto es de mucha identificación para nosotros, para mi es muy importante; forma parte de la identidad de la comunidad, de nuestro país, que también nos da ese privilegio y a menudo tenemos el objetivo de animar y motivar a trabajar juntos en este proyecto de conservación de Teocintle”, manifestó.
El MARENA, mediante el proyecto GEF 5, realiza visitas de seguimiento a los productores y sus parcelas, con el fin de verificar el establecimiento, germinación y desarrollo del maíz Teocintle.
Garantizar la subsistencia del Teocintle es una tarea de todos los días, que obliga a la participación efectiva de los productores, alcaldías municipales e instituciones del Buen Gobierno.
Desarrollamos junto al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria un programa de conservación del maíz Teocintle, que busca el fortalecimiento comunitario mediante bancos de semillas, cursos y talleres, ferias, intercambios de experiencia, proyectos productivos sostenibles, como métodos y sistemas que se implementan como estrategia para la conservación.
“Me siento orgulloso, porque de esta forma estamos preservando esta especie de semilla que es genética, que en un futuro puede servir para hacer otras variedades”, comentó el Cro. Felipe Méndez, Propietario de la Finca Monte de los Olivos.
“Verdaderamente, es esto es un privilegio y nos permite poder contar con mucho apoyo”, concluyó el Cro. Nilson Martínez, Propietario de la Finca Jehová Jireh.
Teocintle, una especie que ya muestra recuperación.